El proyecto Grow Green Valencia desarrollado por el espacio de innovación Las Naves junto a otros socios, en el Barrio del Artista Fallero, en el distrito de Benicalap, ha implementado una serie de actuaciones y proyectos de reforma urbana a través de las conocidas como soluciones basadas en la naturaleza (SBN) que buscan testar y comprobar los efectos positivos e impactos que estas soluciones tienen en entornos urbanos para la mitigación y adaptación de los efectos del cambio climático.
Dentro del proyecto se han desarrollado diversas actuaciones, como un jardín vertical, una cubierta verde, la reforma urbana de espacios críticos mediante la vegetación y una serie de proyectos colaborativos, mediante participación ciudadana para proponer soluciones concretas a algunos problemas detectados en el barrio. Así a propuesta de Paisaje Transversal, otro de los socios y encargado de todo el proceso participativo, se convocó un concurso de soluciones verdes colaborativas y se eligieron 5 propuestas diversas para desarrollar en el barrio. Estas 5 propuestas proponían el uso de SBN para mejorar o combatir algún problema específico.
Diversas asociaciones del barrio agrupadas propusieron la reconversión de un espacio vacío sin uso en el barrio en unos huertos urbanos, gestionados por ellos mismos. El Espai Verd es un espacio cedido por el ayuntamiento, que históricamente ha sido huerta, pero que la expansión de la ciudad convirtió en un descampado, reconvertido de nuevo en huerta y gestionado participativamente. Este es un ejemplo de que la soberanía alimentaria puede ser alcanzada por el vecindario recuperando espacios sin uso.
Dentro de este espacio se encuentra el Centre Cívic, un recinto auto-construido por el vecindario, asociaciones y otros colectivos, con materiales 100% reciclados y con un diseño colaborativo, que alberga las asambleas donde las asociaciones del barrio, el vecindario y otros colectivos gestionan este proyecto.
El Dispositivo de Sostenibilidad Urbana se diseñó con el propósito de ofrecer sombra y un espacio de estada y cobijo a los alumnos del instituto IES de Benicalap en los tórridos meses finales de curso. En los institutos y colegios suelen faltar espacios más amables y verdes y este dispositivo, diseñado y realizado por los propios estudiantes de varias escuelas del barrio es un modelo que puede ser replicado en cualquier lugar y que combate el Efecto Isla de Calor propio de espacios urbanos muy construidos.
Un problema habitual es las ciudades pueden ser las plagas de algunos insectos. La falta de fauna que pueda combatirlos propicia estos desequilibrios ecológicos. Es necesario reincorporar la biodiversidad en las ciudades, incrementar el verde urbano y la presencia de aves, polinizadores, etc… Así la propuesta de Aliats Alats busca, a través del estudio y seguimiento de los murciélagos, estudiar el impacto positivo de éstos en la lucha contra el mosquito tigre. Justamente en el parque más grande de este barrio de la ciudad, limítrofe con la huerta conviven el 75% de las especies de murciélagos presentes en la ciudad de Valencia. En su propuesta han trabajado con el alumnado de primaria en la elaboración de cajas nido para éstos mamíferos que conviven entre nosotros ocultos en la naturaleza urbana.
Dentro del proyecto Grow Green Valencia, aunque a parte de las Propuestas Colaborativas que acabamos de mencionar, cabe destacar un proyecto de regeneración urbana muy interesante. El Bosquete y el Corredor Verde-Azul, dos actuaciones singulares dentro del barrio. Un espacio vacío urbano, entre el consolidado Parque de Benicalap y la Huerta, se ha utilizado como laboratorio para diseñar un jardín, simulando a un bosque mediterráneo, que sea capaz de gestionar el agua de lluvia, casi siempre torrencial en nuestra ubicación, aprovechándola al máximo, filtrándola y repartiéndola eficientemente entre la vegetación.
Los sistemas de drenaje urbano tradicionalmente no han diferenciado entre aguas de lluvia y aguas negras, desaprovechando un recurso cada vez más escaso. El Bosquete, mediante un diseño que imita la naturaleza, consigue frenar, almacenar y filtrar el agua de lluvia. El proceso de filtración supone que las aguas que llegan al sistema de alcantarillado están más limpias lo que se traduce en menos coste económico y energético para las depuradoras.. Estas actuaciones se enmarca dentro de los denominados Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible. Como ejemplo, en el Corredor se han descubierto partes de la acera y la calzada pavimentadas y se han sustituido por material permeable, para permitir que los árboles respiren, que aprovechen mejor el agua de lluvia y cuando llueva, el agua se pueda infiltrar al subsuelo, su lugar natural.
Cabe destacar también la App que se ha desarrollado para este proyecto. Una aplicación que permite a los más jóvenes aprender sobre biodiversidad a la vez que se mueven por el barrio. Pueden conocer las especies de árboles o aves presentes en la ciudad de Valencia.
La ciudad de Valencia conserva una de las pocas huertas periurbanas aún presentes en Europa. Una ciudad y su área metropolitana con casi millón y medio de habitantes, rodeados de campos de cultivos y huerta con un valor histórico, cultural y paisajístico incalculable. A la vez un espacio de amortiguación de la contaminación acústica y ambiental propia de las grandes urbes, reserva y cobijo de muchas especies de fauna y flora. Con un enorme valor climático, pues permite a la ciudad regular la temperatura, filtrar el agua, proveerse de alimentos, y proporciona un lugar de ocio y esparcimiento cercano a los barrios de la ciudad. El proyecto Grow Green Valencia sirve como ejemplo de que la vinculación entre lo natural y lo construido es posible y que además puede ser desarrollado de una manera participativa y colaborativa.
Hemos comentado que el proyecto Grow Green Valencia sirve como laboratorio urbano dónde poner en práctica diversas Soluciones Basadas en la Naturaleza (SBN). Se entiende por SBN aquellas soluciones inspiradas, apoyadas o directamente copiadas de la naturaleza, que buscan resolver algún problema ambiental, social o económico de una manera innovadora. Estas soluciones son eficientes, económicas y resistentes al cambio y deben adaptarse al contexto local. Tienen la capacidad de impactar en un conjunto de variables ambientales, sociales y económicas y además se busca que sean replicables. En los proyectos llevados a cabo en Benicalap tenemos proyectos que fomentan la biodiversidad urbana, mejoran la calidad del aire y del agua, regeneran espacios degradados, mejoran el empleo local y buscan la implicación ciudadana, la participación vecinal y la toma de decisiones desde el asociacionismo.
Así tenemos como principales objetivos e impactos de las soluciones basadas en la naturaleza, los siguientes:
Adaptación y Mitigación: se trata de la capacidad de reaccionar y responder a un estímulo externo o tensión como el cambio climático, y el potencial de mejorar el estado actual de un parámetro a través de una acción activa o pasiva que nos da la SBN.
Aprovechamiento del agua: Como la SBN puede contribuir para solucionar los tres problemas principales relacionados con el agua: riesgo de inundación, escasez de agua y calidad de agua.
Conectividad: Los espacios verdes son reservas importantes de biodiversidad urbana, proporcionan recursos, servicios ecosistémicos y hábitats para especies de interés, mejorando la conectividad funcional y estructural al nivel urbano.
Calidad del aire: Las SBN basadas en la creación o restauración de ecosistemas en entornos antropizados juegan una función importante al sacar contaminantes del aire y dióxido de carbono, reduciendo la temperatura ambiente y aumentando la concentración de oxígeno.
Regeneración urbana: Este concepto apunta a mejoras dentro del ámbito económico, físico, social y medioambiental de un casco experimenta dificultades, mejorando su resiliencia.
Participación y gobernanza: Las SBN tienen que enfocarse en los intereses y percepciones de ciudadanos, incorporándolos en las políticas y planeamientos urbanos.
Cohesión social: Este concepto apunta a introducir la justicia medioambiental y la cohesión social que dan las SBN en los núcleos urbanos.
Salud pública y bienestar: Las SBN pueden contribuir en un campo ancho de beneficios psicológicos y fisiológicos positivos, mejorando la salud humana.
Oportunidades económicas: Las áreas verdes y las SBN dan considerables resultados económicos positivos (salud, servicios ecosistémicos, nuevos puestos de trabajo, etc…)
En este mapa podréis ubicar las actuaciones dentro del Distrito de Benicalap: